Qué es un bug en informática

Cuando se trabaja con un programa informático se pueden producir errores que muestran un comportamiento indeseado. Estos fallos o bugs tienen su origen en el diseño y programación del software, permanecen escondidos u ocultos a los desarrolladores durante los test, y se manifiestan una vez los usuarios comienzan a utilizar el programa de forma habitual.

A continuación, mostraremos qué es un bug en informática, cómo puede afectar al trabajo y cómo podemos evitarlos.

Qué es un bug

El significado de bug es “bicho” o “insecto”, y en informática se dice que hay un bug cuando se produce un error o fallo en un programa que tiene como consecuencia un resultado o comportamiento inesperado.

Cuando se produce un bug el programa no deja de funcionar o se bloquea, simplemente sigue funcionando, aunque con unos resultados inesperados o un comportamiento anómalo.

Un claro ejemplo de los bugs en informática lo podemos encontrar con la aparición de una nueva versión de un sistema operativo (Windows o Android, por ejemplo). Al instalar esta nueva versión siempre aparecen errores o bug que son corregidos con parches posteriores.

En qué consisten y cómo podemos evitarlos

Cuando se produce un bug en informática los sistemas pueden quedar expuestos, así como la información de los usuarios y las empresas. Los ciberdelincuentes buscan bug en los programas para poder acceder a los sistemas, robar información y realizar ataques con malware y otro tipo de infecciones.

Para minimizar los bugs informáticos y reducir su impacto en una empresa o particular, se pueden tomar una serie de medidas.

Utilizar depuradores

Los depuradores o debuggers son programas que analizan el código en busca de errores y los depuran o solucionan cuando los encuentran. Son utilizados por programadores y administradores de sistemas para corregir fallos que pueden ocasionar riesgos de seguridad.

Revisar la compatibilidad entre programas

Cuando se trabaja con distintos programas es importante comprobar si son compatibles entre sí a la hora de intercambiar información o procesos, para evitar la aparición de algún bug durante su uso. Un ejemplo lo podemos encontrar en una web diseñada con WordPress. Cada vez que se añade un nuevo plugin o complemento es importante verificar su compatibilidad con la versión de WordPress que se está utilizando para evitar la aparición de estos molestos bugs.

Actualizar el hardware

Muchos bugs se producen por problemas de incompatibilidad entre el software y el hardware por lo que es importante actualizar computadoras y otros dispositivos, reduciendo así el riesgo de que se produzcan este tipo de fallos.

Limpiar el equipo de malware

Muchos programas maliciosos interfieren en el comportamiento del software instalado en el equipo. Es recomendable realizar escaneos y limpiezas periódicas de los equipos para que este tipo de software no pueda hacer uso de bugs y vulnerabilidades para atacar el sistema (bloqueando su acceso, robando información, u otro tipo de actividades peligrosas).

Valorar la actualización del sistema operativo a una nueva versión

Con las nuevas versiones de un sistema operativo o programa siempre vienen asociados una serie de bugs que se van corrigiendo posteriormente. Esto es así porque los test que se llevan a cabo durante su desarrollo no tienen el nivel de alcance que se produce cuando son utilizados por una gran cantidad de usuarios tras su lanzamiento. Por este motivo es mejor esperar antes de instalar una nueva versión hasta comprobar que los desarrolladores lancen parches para reparar los posibles bugs del lanzamiento.

Cómo puede afectar un bug

Un bug puede tener distintas consecuencias cuando se producen. Pueden tratarse de errores leves que apenas afectan al funcionamiento habitual del programa, como sucede en muchos videojuegos cuando hay un bug gráfico y se producen escenas extrañas o movimiento de personajes anómalos.

También pueden producirse errores informáticos con mayor gravedad, como por ejemplo al utilizar un plugin de formulario en WordPress que no es compatible con su versión, y los datos de registro que envían los usuarios llegan con extraños caracteres.

Los bugs más graves son aquellos que pueden llegar a bloquear el sistema o que exponen los datos a tercero. Si recordamos la presentación de Windows 98 podemos ver un claro ejemplo de un error grave que bloqueaba el sistema. Cuando Bill Gates presentó la nueva versión de Windows, que venía a sustituir a Windows 95, se produjo un pantallazo azul en directo debido a un bug del sistema operativo. 

Hemos visto qué son los bugs, cuál puede ser su alcance y cómo evitarlos. Como usuario es complicado evitar los bugs, ya que al tratarse de errores de código no hay un control sobre los mismos. En estos casos, la mejor solución es informarse y evitar utilizar programas o versiones de programas que contengan bugs, hasta que se solucionen.

Como programadores, administradores de sistemas o desarrolladores webs si se pueden tomar muchas medidas para evitar los bugs como realizar mejores test, depurar el código y utilizar herramientas compatibles, entre otras.